En este cuarto recopilatorio de brevedades se mezclan pensamientos y ficciones a su aire. Digamos que estos textos son, negro sobre blanco, cuanto transita por la soledad de mi cabeza después de pasar, eso, sí, por el corazón, el oído y otros filtros como son la lectura en voz alta y los ojos sabios y entrenados de amigas que me leen y a pesar de eso aún me quieren. Son escenas o dioramas que se nutren de exposiciones fotográficas, noticias publicadas en prensa y de cuanto escucho y remueve mi interior. La segunda parte no responde a ningún título encriptado sino a lo que anuncia: "Algunas impresiones sobre Berlín". Son textos que adquirieron su textura durante y después de una estancia corta pero intensísima en esta ciudad en la que no pude parar de fotografiar y tomar notas. De ese material y de su fermentación en mi interior surgió lo que ahora expongo con todas sus imperfecciones.